Este balancín super evolutivo da tanto juego a los más peques como a los más mayores.
Los mayores se pueden balancear de pie, sentados o tumbados, ponerse de pie encima del puente y otear el horizonte, saltar desde lo más alto… o bien ponerlo de lado para juego simbólico, simulando una tienda, una panadería o cualquier cosa que se les ocurra.
Los más pequeños, desde el gateo, podrán subirse por el arco volteado gracias a sus escalones pensados para ello, pasar por debajo como si de un túnel se tratara o simplemente dejarse mecer dulcemente.
La parte de balancín es totalmente lisa y el puente cuenta con pequeños escalones para ayudarles a trepar. Todos los cantos tanto de las tablas como de los arcos están redondeados.
La curva que traza el balancín con su propio movimiento está cuidadosamente pensada, testada y trabajada para lograr un balanceo perfecto.
Los laterales los realizamos con huecos donde se insertan las tablas para un montaje ideal, un acabado mucho más limpio (evitamos cantidad de tornillos), y sobretodo para conseguir una solidez a prueba de niñ@s!!!
Fabricado en madera natural y barnizado con tintes no tóxicos.
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